Cayó como un baldazo de agua fría, la violación y el grado de violencia que debió soportar una joven de 24 años el pasado fin de semana, a manos de un individuo que hacía un tiempo paraba en la localidad de Agote, cuyo domicilio real era la ciudad de General Rodríguez.

“Tenemos varios hechos de inseguridad en Gowland, que lo venimos diciendo desde hace un tiempo, pero esto que ocurrió nos ha superado, nos da miedo, nos obliga a tomar medidas que hasta hace unos años atrás eran impensadas. Acá llegó mucha gente a la que desconocemos su paradero, sabemos que muchos están en lugares usurpados y no es casual que en la mayoría de los hechos de inseguridad, tiene involucradas a personas que no residen en la zona ni en la ciudad, son de afuera”, nos decía en una charla un vecino que nos pidió preservar su identidad, por ahora, porque ya ha tenido inconvenientes y teme por su familia.

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Nos hizo un breve recorrido por su casa, hoy totalmente enrejada. “Esto no es típico de Gowland, pero estamos obligados a hacerlo. Bueno, como verás, perros no nos faltan”.

Otra vecina lindera opinó lo mismo. “No puedo creer todavía lo de esta nena. Me corrió escalofrío pensando en mis hijas que van a la escuela y muchas veces hasta van a hacer los mandados cerca de casa. Imagínense que desde el fin de semana no lo harán más”.

En pocos días ellos y otros vecinos comprometidos con su lugar de residencia, darán a conocer un pedido oficial a las autoridades municipales y policiales por temas puntuales que pretenden se lleven adelante. Por ejemplo un relevamiento en la población y sobre todo en lugares específicos donde puede haber usurpadores. También un control de identificación y de vehículos más exhaustivo a la policía en horarios nocturnos. “Es una manera de prevenir”, señalaron.

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Hoy Gowland se ha transformado en un pueblo del partido de Mercedes, donde la densidad de población ha crecido de singular manera. “Antes vos caminabas por la calle, por la estación, por los comercios y no dejabas de saludarte con todo quien se te cruzara. Hoy no sabemos con quienes lo hacemos. Seguramente más de un vecino se ha cruzado con esta persona que no tiene perdón con lo que hizo, entonces es lógico que nos invada esta preocupación”.

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Esta semana van a juntar adhesiones de los vecinos para pedir un encuentro formal. “Necesitamos ser escuchados, esto que ocurrió ha sido la gota que colmó el vaso. Perdimos no hace mucho a un vecino que también fue asaltado”. “Ni te cuento lo que va a ocurrir con Gowland, cuando llegue la Cárcel Federal”, nos dijeron.