Solá consideró que también las clausuras de desarmaderos ayudaron a “descomprimir la situación de inseguridad”, ya que “se está cortando la cadena de comercialización de automóviles robados”. En un breve contacto con los periodistas al finalizar la ceremonia del 65º aniversario de Gendarmería, afirmó: “Notamos un cambio y una mejora con la presencia de todas las fuerzas de seguridad y una actitud de reactivación de la Policía de la Provincia”.

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Además, señaló que “se nota que ha bajado el ambiente del delito impune en el que nos encontrábamos hace tres semanas, o por lo menos ha bajado la sucesión de hechos resonantes que generaron las alternativas que hemos vivido”.

Solá adelantó que en los próximos días mantendrá dos reuniones con el ministro de Seguridad de la Nación, Gustavo Béliz, para hacer un balance de resultados de los operativos realizados que “no van a cesar porque el trabajo contra el delito, que en las últimas semanas se concentró en la cuestión de los desarmaderos, ayudó a descomprimir la situación de inseguridad”.

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Por otra parte, consultado sobre la designación del nuevo jefe de la Policía, el Gobernador reiteró que no descarta la elección de un hombre que no pertenezca a la fuerza, pero insistió en que se tomará “el tiempo necesario” para seleccionar al reemplazante del comisario general Alberto Sobrado.