El tiene 63, ella 22, y afronta el prejuicio de ser considerado un “Sugar Dady”

La vida del canadiense Jeffrey Oberman parecía estar resuelta, pero no pensaba tener que lidiar con los prejuicios.

Vive en República Dominicana desde 2007, su lugar de retiro luego de terminar su carrera de bienes raíces. Desde la tranquilidad de su vida de jubilado, Jeffrey contribuía en una página de rescate animal de los Estados Unidos.

Así fue como conoció a una jovencita llamada Alex que por aquel entonces tenía solo 20 años. Todo transcurrió en pocos meses. Luego de un tiempo en el que ambos interactuaron de forma virtual, Alex viajó a Republica Dominicana para conocer a su enamorada.

Jeffrey declara que le envió un mensaje a la joven y que a pesar de ser 40 años mayor sus conversaciones se tornaron cada vez más intensas. Ninguno sabía que terminarían casándose. Este hecho desató un conflicto en la familia de la joven, ya que afrontaría un viaje para conocer a un total desconocido.

Jeffrey y Alex tuvieron que lidiar con los prejuicios desde el inicio de la relación. La razón: 4 décadas de diferencia en las edades. Esto culminó en el hecho de encasillar al hombre en “Sugar Dady”. Este concepto corresponde a una persona (generalmente hombre) que se encuentra en una relación sexual transaccional con una persona mucho menor que él.

La realidad es que Jeffrey lejos está de querer ser visto como Sugar Dady argumentando que en su caso no necesitaba solo sexo, sino intimidad y cariño. “No tuve que casarme por sexo y ella no tuvo que casarse por dinero, aunque eso es exactamente lo que todos pensaban“, agregó.

A pesar de los prejuicios recibidos a diario, Jeffrey y Alex atraviesan un presente feliz y muy prometedor y asegura que la paz se consigue dejando de lado el qué dirán y retomando su vida, más allá de las redes sociales y ese juicio permanente en boca de todos.

Fuente: Bio Bio Chile