Duhalde pone límites a los ajustes pedidos por el FMI

El mandatario nacional teme que la instrumentación de ciertas medidas solicitadas por el organismo internacional derivarían en un clima de caos y anarquía.

Confiado en que finalmente el Fondo Monetario Internacional ayudará a la Argentina, se mostró ayer el presidente Eduardo Duhalde, aunque admitió que hay medidas de ajuste que no se podrían aplicar de manera inmediata.
“Derivarían en un clima de caos y anarquía”, dijo.
Por otra parte, Duhalde reconoció que si en una primera etapa de acuerdo con el FMI, llegan al país sólo 8 ó 9 mil millones de dólares, la recuperación de la economía se demorará algunos meses más de lo previsto.
“No se puede avanzar en todo lo que ellos creen que se puede avanzar, porque hay medidas que no sólo no serían beneficiosas, sino que llevarían a la Argentina a un caos, a una anarquía que debemos evitar”, indicó.
El jefe de Estado adelantó que solicitará una entrevista con el presidente de los Estados Unidos, George Bush, con el fin de explicarle la situación económica y social de la Nación y, de esa manera, acelerar la ayuda del FMI.
En cuanto a la reciente visita de una misión del FMI encabezada por Anoop Singh, Duhalde dijo que deja una esperanza.
“Nosotros estamos cumpliendo en dos meses los reclamos que hicieron por años”, manifestó.
Con relación a la recuperación de la economía, señaló que de contarse con la ayuda del FMI va ir mucho mas rápido.
“De lo contrario, naturalmente vamos a pasar por muchas penurias, pero de todas maneras Argentina tiene una potencialidad que seguramente nos va a sacar de este pozo en el que estamos y nos va ir reubicando en lugar que debemos estar”.

Reclamos
“El FMI reconoce que en estos dos meses hemos avanzado en un 75, 80% de los reclamos que viene haciendo desde hace muchos años”.

Escrache a Jorge Remes Lenicov
El ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, sufrió ayer en carne propia el disgusto de los ahorristas atrapados en el “corralito”, al ser fustigado por manifestantes, por lo cual debió refugiarse en el Palacio de Tribunales durante unas dos horas.
Unos 50 ahorristas, en su mayoría puntanos, realizaron un “cacerolazo” en el cuarto piso de la sede de la Corte Suprema, al grito de “chorros, devuelvan los depósitos”.
Ello, mientras se llevaba a cabo una reunión conciliatoria que no arrojó resultados positivos entre funcionarios de San Luis y la Nación, ante el congelamiento de un certificado de plazo fijo por 234 millones de dólares de la provincia.
Más tarde, la gobernadora Alicia Lemme anunció que San Luis denunciará ante la Justicia al presidente del Banco Nación, Enrique Olivera, por defraudación y estafa.