El presidente argentino Javier Milei ha dispuesto tres días de duelo nacional como respuesta a la tragedia ocasionada por el temporal que azotó Bahía Blanca y zonas aledañas durante el pasado viernes.

La administración nacional implementó un operativo de emergencia inmediatamente después de recibir las primeras alertas sobre la catástrofe. El Gobierno puso a disposición la totalidad de sus recursos para desarrollar labores fundamentales como rescate, evacuación, atención médica y alojamiento provisional para los afectados.

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Para coordinar eficazmente la respuesta gubernamental, el Ministerio de Seguridad Nacional junto con la Agencia Federal de Emergencias activaron el Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR). Este mecanismo permitió desplegar a la Prefectura Naval, la Gendarmería Nacional y las Fuerzas Armadas, quienes fueron movilizadas por el Ministerio de Defensa para asistir directamente a los damnificados con vehículos de evacuación tanto terrestres como fluviales.

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Como parte de las medidas de contención, se habilitaron instalaciones militares para albergar a los evacuados. El Batallón de Comunicaciones 181 y la Base Naval Puerto Belgrano fueron acondicionados como centros de refugio. Simultáneamente, las fuerzas de seguridad continúan colaborando con autoridades locales y provinciales en la búsqueda de personas desaparecidas que siguen siendo reclamadas por sus familiares.

El Ministerio de Capital Humano ha contribuido significativamente al enviar suministros esenciales mediante vuelos de la Fuerza Aérea Argentina. Por su parte, el Ministerio de Salud reforzó el sistema sanitario local con ambulancias, medicamentos y un hospital móvil con capacidad para 40 pacientes.

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En el aspecto económico, el gobierno nacional ha aprobado un paquete de ayuda extraordinaria de 10.000 millones de pesos destinados al municipio de Bahía Blanca. Estos fondos serán utilizados para la reconstrucción de infraestructuras dañadas y para brindar asistencia directa durante el proceso de recuperación urbana.

El comunicado finaliza asegurando que todas las áreas del Gobierno Nacional permanecerán comprometidas con la asistencia a los damnificados, trabajando conjuntamente con el municipio de Bahía Blanca y la Provincia de Buenos Aires durante este período de dolor que afecta a toda la sociedad argentina.