SALVAJE ROBO A UN MATRIMONIO
Una semana atrás Protagonistas daba cuenta del robo a una familia residente en el Cuartel VIII de nuestra ciudad, donde tres sujetos tomaron por sorpresa a una familia y tras amenazarlos durante dos horas lograron sustraerles una suma cercana a los 15 mil pesos.
Lamentablemente una vez más tenemos que hablar de un episodio de características similares, aunque en esta ocasión con salvajismo incluído.
Carmelo Angelucci y Rocina Marea, padres de Gustavo y Antonio Angelucci, conforman un matrimonio mayor, que reside en la esquina de las calles 22 y 7. Allí cuentan con un almacén de su propiedad, mientras que detrás del mismo se encuentra su vivienda. Lo cierto es que este matrimonio se vio sorprendido el miércoles por la noche por dos sujetos, quienes tras lograr ingresar a la finca lograron llevarse una cantidad no precisada de dinero tras haber golpeado al comerciante.
Al respecto, un cronista de Protagonistas pudo charlar con las víctimas de este repudiable hecho, quienes narraron como sucedieron los hechos durante la noche del miércoles. “Eran aproximadamente las 22:45, cuando mi señora se había ido a dormir y yo me encontraba mirando el partido de Boca en TV; de pronto cuando me levanto para irme a dormir, siento que me agarran de atrás, pero pensé que era mi hijo soltero que había venido. Sin embargo, quien me sostenía, de pronto comenzó a gritarme hijo de p... dame la plata si no te mato. Yo me preguntaba por donde había aparecido, ya que estaba seguro de haber cerrado todas las puertas con llave”. Enseguida el sujeto condujo a Angelucci al interior de un dormitorio, donde tras arrojarlo al piso comenzó a pegarle con un revolver para volver a agredirlo verbalmente y exigirle que le entregara dinero. Mientras tanto, la mujer del dueño de casa, escuchó los ruidos y comenzó a gritar ¡que pasa querido!. De inmediato entró en acción otro sujeto, que se abalanzó sobre la esposa de Angelucci y tras tomarla de los pelos también comenzó a gritarle que le diera la plata. Cuando vio que uno de los delincuentes estaba golpeando a su marido trató de apaciguar las cosas gritando “Sí, ahora te la doy, ahora te la doy; no me mates, no mates a mi marido. Y ellos contestaban, que te lo mato, dame la plata”.
Los malvivientes comenzaron a revisar en distintas dependencias de la casa, y luego el dueño de la finca le facilitó la llave de una caja fuerte que se encontraba en el negocio. Para abrirla le apuntaban con un revolver a la cabeza de la mujer y le pedían que la abriera ella.
Si bien no recuerdan mucho, explicaron que uno de los cacos tenía su rostro semi tapado, y estiman que se trataba de gente joven. La presencia de los sujetos en el interior de la casa se prolongó por alrededor de una hora, y tiempo más tarde, cuando ya se habían marchado con una suma de dinero no precisada , llegaron efectivos de la comisaría Mercedes, aunque por el momento no se tienen mayores novedades en cuando a la identidad de los dos sujetos que cometieron este salvaje hecho delictivo.
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