DON ENRIQUE RODRIGUEZ FUE DADO DE ALTA ESTA MADRUGADA

Esta madrugada fue dado de alta Ernesto Rodríguez de la clínica porteña en la que se hallaba internado desde el miércoles pasado cuando fue liberado a sangre y fuego por la policía de una quinta de San Andrés de Giles tras sufrir un verdadero calvario en los 43 días que permaneció secuestrado.

El padre del empresario Jorge “Corcho” Rodríguez se retiró hacia un departamento de su hijo en la Capital Federal “hemodinámicamente estable y compensado”, según las fuentes médicas, mientras que uno de los facultativos que lo atendió dijo que se suspendió la conferencia de prensa anunciada para hoy y de la que iba a formar parte la propia víctima de este atroz hecho delictivo.
Uno de los médicos del Instituto Sacre Coeur donde estuvo internado cinco días Ernesto Rodríguez luego de ser rescatado de un secuestro impiadoso aseguró hoy que fue dado de alta porque su estado físico como psicológico es “muy bueno”, aunque aclaró que debe continuar su rehabilitación.
El médico cardiólogo Ricardo Dalton, uno de los que atendió al padre del empresario Jorge “Corcho” Rodríguez en la clínica ubicada en Paraguay al 3100 del barrio porteño de Palermo, anunció la suspensión de la conferencia de prensa -sería por recomendación de los fiscales para no alterar su estado psíquico y emocional pese a que la propia víctima quiere relatarle a los medios las penurias por las que atravesó- y comentó que “la familia y él ayer decidieron que lo mejor era retirarse.
Va a haber algunos controles, eso lo vamos a ir programando con el transcurso de los días y de acuerdo a cómo vaya evolucionando, junto con el doctor (Alfredo) Cahe”, médico personal de Rodríguez.
Al ser consultado sobre la recuperación psicológica del paciente tras 43 días de secuestro, el médico afirmó que es “muy buena, realmente muy buena” y que “está supervisado por la gente de psicocardiología del instituto y en tratamiento”.
“Tiene una buena relación con la familia, con nosotros (los médicos), está elaborando muy bien este proceso que ha comenzado el día de su captura”, agregó al respecto.
Sobre su evolución clínica, Dalton contó que Rodríguez “físicamente está bien, está recuperado su estado nutricional y de hidratación, estaba caminando y muy bien, es decir, que ha recuperado mucha fuerza muscular” y agregó que están controladas “su arritmia” y “su presión arterial”.
Respecto a los próximos pasos de su rehabilitación, Dalton aseguró que Rodríguez necesita “fundamentalmente un poco de reposo que es lo que necesita en este momento y ajustar bien el tratamiento que le hemos instaurado en el alta”.
Por último, sobre las posibles secuelas que puede padecer el paciente, el profesional dijo que “desde el punto de vista clínico, está todo muy bien y realmente lo dudo, pero desde el punto de vista psicológico esa respuesta la tiene el servicio de psicocardiología”.
Según trascendió, el padre del empresario Jorge Rodríguez se alojó en un departamento cercano a esa clínica -propiedad de su hijo- para poder realizarse con mayor comodidad las revisiones sanitarias y psicológicas, explicaron las fuentes médicas.
Los chequeos permanentes también apuntan a un control más preciso del estado anímico de Rodríguez, frente al temor de un “quiebre psicológico”, por las difíciles circunstancias que atravesó durante su cautiverio. Esto significa que deberá asistir continuamente a esa clínica para someterse a estudios y análisis clínicos de control, hasta que su organismo recupere sus valores normales, explicaron.
En tanto, el director del Instituto Sacre Coeur, Carlos Alvarez, dijo esta mañana que ayer, “a altas horas de la noche”, se reunió la familia de Rodríguez en el nosocomio y se decidió darle el alta ya que “se había recuperado muy bien y la situación médica lo permitía”.
En ese sentido, el director del Instituto señaló que el empresario Jorge “Corcho” Rodríguez había hablado con los fiscales y aproximadamente “a las 22.30, 23 horas se decidió darle el alta”, atento a su estado y a la madrugada salió a la calle para seguir con su tratamiento ambulatorio.
“El paciente está muy bien, y ayer, por ejemplo, se pasó todo el día tomando sol en la terraza del segundo piso”, manifestó Alvarez y ese fue uno de los motivos para adelantar la decisión de que abandone el Instituto.