Desde ayer el Profesorado “Ciudad de Mercedes” tiene nuevas representantes legales

Lidia Prina y Juana Ganduglia fueron puestas en funciones de manera oficial por Monseñor Agustín Radrizzani Arzobispo de Mercedes-Luján. Ambas funcionarias agradecieron la confianza dispensada en su persona por hacerlas partícipes de tal responsabilidad.

Las primeras en hacer uso de la palabra fueron las señoras Prina y Ganduglia

La máxima autoridad de la Iglesia Católica regional dijo, “creo que el objetivo de ser honesto ciudadano y buenos cristianos es la finalidad de toda obra educativa”.
En la tarde de ayer en el salón de actos del Colegio Parroquial se llevó a cabo la ceremonia donde asumieron como las flamantes representantes legales del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica “Ciudad de Mercedes”, las señoras Lidia Prina y Juana Ganduglia. El acto contó con la presencia de Monseñor Agustín Radrizzani Arzobispo de Mercedes-Luján, Monseñor Jorge Bruno Vicario General de la Arquidiócesis, el intendente Carlos Selva, el Secretario de Gobierno municipal Dr. Sergio Apezteguía, el Inspector de Dipregep Alberto Teijeiro y demás autoridades relacionadas a la docencia y al quehacer del Instituto.
Las primeras en hacer uso de la palabra fueron las señoras Prina y Ganduglia quienes expresaron, “primero y antes que nada queremos agradecer a Monseñor Agustín por haber confiado en nosotras para emprender esta difícil tarea que nos ha encomendado. A Monseñor Jorge Bruno a quien le causamos todas las molestas diarias con nuestras consultas. Nosotros queremos tal como lo hemos conversado con los docentes y autoridades del Instituto convocar a ustedes a que sean partícipes para formar parte de este espacio de mutua colaboración, en donde deben expresarse todas las ideas para poder sortear de la mejor manera posible todos los obstáculos que se nos presenten. Por otro lado queremos conocer en profundidad a docentes y alumnos y escucharlos sobre todo porque pensamos que nuestra tarea acá es sobre todo allanar esos caminos que se nos pueden presentar junto a proyectos que están por aparecer y otros que están en vías de ejecución. Sabemos que el cuerpo docente y el cuerpo administrativo de esta institución están trabajando muy duro por la misma por lo tanto queremos dejar en claro que vamos a consolidar vínculos con ellos y de esa manera hacer todo lo posible para colaborar con ellos en todo lo que necesiten.
En esta primera etapa de nuestra actividad queremos recuperar el prestigio de la institución, ya que muchos de los profesores han sido motivadores y artífices del prestigio alcanzado por el Instituto con su influencia académica a nivel regional y por la formación profesional de los egresados. Queremos recuperar eso y profundizarlo mucho más, para eso queremos crear un departamento de graduados que nuclee a todos los egresados que servirá de ayuda para los alumnos actuales y para los docentes en la formación de todos los alumnos.
Todo esto en base a nuestro lema que será la cabecera que nos guió y esperamos nos guíe en adelante que es, “Tenaces en el trabajo, la verdad los hará libre”.
Finalmente Monseñor Agustín con su humildad que lo caracteriza, también dirigió unas palabras hacia las nuevas funcionarias de la institución educativa que depende del Arzobispado Mercedes-Luján y comentó, “quiero agradecerles a las señoras Prina y Ganduglia por aceptar este desafío. Hoy estoy muy contento de estar en el seno de esta comunidad entre los muchachos y muchachas que forman parte de esta obra educativa. Ya los obispos en Aparecida (Brasil) ya concordaron en la importancia de la Educación. Por eso en ese documento, hablan de acercarle mucho conocimiento a los jóvenes sin que esto genere una competencia agresiva entre ellos. Por eso si una institución educativa está animada por el Evangelio y por la fe busca no una educación competitiva sino que busca una educación integral, de tal manera que cada uno de ustedes sea conciente de que no solo adquirirá conocimiento sino también incorporará valores jugándose cada vez más por la verdad. Para nosotros la verdad permanente es conocer a Jesucristo, hacerlo conocer y hacerlo amar a El. Y una institución educativa para lograr ese objetivo tendrá que ser verdadera comunidad, y en ella tendrán que estar incorporados directivos, docentes, padres de familia y alumnos. Cada uno en el lugar que le toque, y cada uno buscando mejorar el mundo actual.
Por eso creemos que el objetivo de ser honesto ciudadano y buenos cristianos es la finalidad de toda obra educativa y me agrada mucho el lema que tiene este Instituto que acaban de comentar”.