GOBIERNO CONFIA EN QUE DINERO LIBERADO DEL CORRALITO NO IRA AL DOLAR

La posibilidad de sacar más fondos atrapados en el sistema financiero como paso previo a levantar el corralito beneficiará al 65 por ciento de los ahorristas, ya que sólo una parte minoritaria de las colocaciones son superiores a los montos topes fijados por el gobierno para las nuevas extracciones.

La medida del gobierno es una señal hacia el Fondo Monetario Internacional para que el organismo acceda a un acuerdo de reprogramación de pagos de la deuda que permita liberar la asistencia financiera de otros organismos internacionales al país, pero al mismo tiempo abre un interrogante sobre la implicancia del mayor dinero circulante sobre el Dólar.

Puede Interesarte:

La fe vuelve a mostrarse en las calles mercedinas

“No veo riesgo en cuanto al comportamiento del valor del dólar. No pensamos que estos fondos se vayan al dólar. Hace más de 100 días que el dólar está estable y el Banco Central está ganando reservas”, afirmó Atanasof.

Por otra parte, el funcionario agregó que “además, hay datos altamente significativos en cuanto al crecimiento de los depósitos en el sistema financiero”.

Atanasof remarcó que la medida anunciada por el Palacio de Hacienda apunta básicamente a producir “un acto de justicia” con los ahorristas afectados.

Por otra parte, el vocero del gobierno aclaró que la flexibilización del sistema financiero “no se hace para satisfacer pedidos de nadie” en referencia a la relación con el FMI.

Respecto de esto último, destacó los esfuerzos de la actual gestión para levantar gradualmente el corralito, al señalar que “este gobierno recibió esa inmundicia y ahora, sin producir descalabros ni hacer estallar la bomba de tiempo, estamos liberando el 65 por ciento de los depósitos y vamos a seguir trabajando porque es el objetivo llegar más lejos en la liberación del corralito”..

Atanasof destacó que la flexibilización del corralito beneficiará a “700 mil ahorristas”, y agregó que esta medida se complementa “con el nuevo canje de bonos”, e implica “un acto de justicia y servirá para marchar rápidamente hacia la normalización definitiva del sistema financiero”.