En una comunicación telefónica exclusiva con Claudia Ivaldi, secretaria de la Sociedad de Fomento de Gowland - Agote, se arrojan luces sobre el complejo panorama que atraviesa el Centro de Jubilados de la localidad.

La situación se vuelve crítica cuando se revela que una Asamblea, que ya había sido levantada hace más de 20 días, se reanudó bajo condiciones cuestionables. “Se llamó a cuarto intermedio, figura que no existe en una asociación civil”, explica Ivaldi. Este proceder, según la secretaria, ha generado un clima de descontento entre los jubilados asociados, quienes reclaman transparencia y participación en la gestión del centro.

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Los jubilados, agrega Ivaldi, se sienten marginados y tratados con desdén. “No los dejan presentar una nueva lista porque estaba fuera de término y se rigen a rajatabla del Estatuto, pero no se rigen a rajatabla en cómo tienen que presentar los libros”, afirma. Esta falta de consideración hacia los asociados ha desencadenado una serie de reclamos por parte de los jubilados, quienes buscan simplemente un espacio donde compartir actividades como tomar mate, bailar y tejer.

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El manejo arbitrario de la situación por parte de quienes lideran la Asamblea ha exacerbado aún más las tensiones. “Manejan esto como a su antojo”, señala Ivaldi, refiriéndose al accionar de ciertos individuos dentro del centro.

Ante esta situación, los jubilados se encuentran desorientados y buscan respuestas. El futuro del Centro de Jubilados de Gowland parece incierto mientras los asociados luchan por su derecho a una gestión transparente y participativa.