Luego de las afirmaciones de Pablo Moyano que indicaban que la misa realizada el sábado en la basílica de Luján, de la que fue participe gran parte del universo peronista, el arzobispo de Mercedes – Luján, Agustín Radrizzani, negó que este suceso se vincule con un apoyo político a los Moyano, alineados ahora con Cristina Kirchner y complicados por la justicia por una causa por asociación ilícita en el club Independiente de Avellaneda.

Aseguró que su actitud no tuvo como fin “ni apoyar a un partido, ni a una ideología, ni a personas concretas”, según publicó Clarín este domingo

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Quienes los cuestionaron apuntaron a que con su actitud Radrizzani dejaba “pegada” a la Iglesia con la oposición, de lo que podía interpretarse, además, un apoyo a Hugo y Pablo Moyano, que estaban entre los presentes y que son asediados por causas judiciales.

Radrizzani, en un comunicado, manifestó que “no hubiese sido pertinente negarme al pedido que me hicieran hace 40 días, de celebrar una misa en Luján, cuando la intensión era rezar por la paz, el pan y el trabajo”.

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También aseguró que “mi propósito, expresado en la homilía, fue propiciar una súplica confiada a Dios para favorecer un clima de diálogo que nos ayude a superar las dificultades que sufren muchos argentinos”.

Además aseguró que “lo esencial para mí, en estos momentos históricos, es aprender a caminar juntos para superar la dolorosa brecha que vivimos en nuestra sociedad”.