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“A Fidel no se le escapa nada”

El joven Diego Arzani está de vacaciones en la ciudad • Hace un año que cursa la carrera de medicina en la isla • Dice que el socialismo no lo asusta • Rescata el orden de la sociedad cubana y asegura que viviría allí.

Por Cristian Falabella
“A Fidel no se le escapa nada”

Diego Arzani

Diego Arzani, el joven mercedino que está estudiando medicina en Cuba, está en la ciudad de vacaciones. Aún sorprendido por el vértigo de la vida en el sur, tras un año entero concentrado en sus estudios en la isla, narró sus vivencias en una visita al programa radial “El sueño se acabó”, que se emite por FM Mercedes de 14.30 a 16. Los conductores del ciclo, Mariano Pérez y Cristian Falabella, entablaron un revelador diálogo con el joven que fue becado gracias a gestiones de la Casa de la Amistad Argentino Cubana, y los aspectos más salientes de la entrevista se reproducen a continuación:
• ¿Qué se siente estar de vacaciones en Mercedes?
Mucho frío (risas). Terrible cambio del Caribe al sur. De 40 grados a 6 ó 7 grados.
• ¿Cómo va tu estudio en Cuba?
Bien. Es un poco exigente la carrera, Medicina general integral. La beca es para médico clínico, y cuando egrese veremos si hay otra beca para la especialidad.
• ¿Cuánto tiempo te lleva la carrera?
Son 6 años. Me quedan 5 más. Estoy en lo que era una base naval, que ahora es una escuela, en La Habana, en un pueblito llamado Mariel.
• Es un campus universitario.
Sí, justo en la costanera. Estamos rodeados de un río. Y al lugar, cariñosamente, le dicen Alcatraz, porque está rodeado de agua: el mar por un lado y un río por el otro.
• Fuiste becado por la embajada, a través de la Casa Argentino Cubana. ¿Postulaste solo o había otros?
No, creo que había otros. Pasa que justo fue el momento en que se volvieron otros dos chicos, y eso a los que se iban a inscribir los hizo dudar un poco.
• Pero vos no tuviste ninguna duda...
No. Yo me dije ‘esta es la mía’. Quería estudiar medicina y el que va allá para estudiar se come todo lo que hay que comer. O sea: la alimentación es a base de arroz y sopa de porotos...
• Qué noches con la sopa de porotos!
Sí, bueno, pero uno se acostumbra (risas).
• ¿Y la vida allá cómo es?
La vida nuestra es de mucho estudio. Estamos en una escuela pupila, de lunes a viernes. Los pases son a partir de las 4 de la tarde del viernes hasta el domingo. Podés salir adonde se te dé la gana pero tenés que volver antes del domingo a las 11 de la noche.
• ¿El método de enseñanza con respecto a lo que vos habías vivido en Argentina qué tal es?
Nada que ver. La medicina es la misma en todo el mundo, pero allá la enseñanza es mucho mejor. Nosotros somos un grupo de 30 chicos con un profesor por cada materia, y es más personalizada. Hay más libros, más manuales de práctica, de estudio, de contenidos. Ellos te van marcando el estudio, uno sabe cómo tiene que estudiar tal tema y el práctico. Aparte el programa está encarado de otra forma: por ejemplo acá ves el sistema esquelético en anatomía y en fisiología podés ver lo que es la sangre, pero allá ves un nervio en anatomía, después lo ves en fisiología, en histología. Es distinto enfoque. A un músculo lo vas a ver en todas las materias, y todo así. Ese sistema de enseñanza es muy bueno y dicen que es el único país que lo tiene.
• Estás con gente de distintos países, hay una riqueza cultural impresionante...
Sí. Hay gente de todo el mundo: de los 24 países latinoamericanos y de os Estados Unidos, que paradójicamente son los que más hay, además hay africanos, árabes, de todo un poco. Los estadounidenses van un mes antes para dar un curso acelerado de español...
• Tus estudios los está pagando Cuba. ¿Tenés que dar algo a cambio por eso?
Sí, los paga Cuba. Y supuestamente cuando me recibo me mandan para mi país, y acá tengo que hacer una reválida porque el título no es oficial. En todos los países lo es, excepto en Argentina y Uruguay. Inclusive en Europa, yo si quiero por ejemplo me puedo ir a Italia y o tengo ningún problema. Es un título reconocido mundialmente excepto acá. No sé cómo son las reválidas, pero seguro te demoran un tiempo más.
• En la relación con los chicos de allá, ¿hiciste amigos?
Los chicos son copados, son gente muy buena, elegidos, muy humildes y amistosos. Allá van a estudiar, si jodés te dan una patada y te mandan de vuelta a tu país. Hay un instructor que está a cargo tuyo y te controla tus estudios y todo. Si estás vagueando se nota. Y si repetís, depende del problema que hayas tenido, te dan una oportunidad más.
• Lo bueno es que el Estado te beque y al mismo tiempo ejerza un control.
Seguro, para no gastar plata en vos de gusto, y además para que no se pierda el lugar otro. La gente de Cuba a nosotros nos rechaza un poco porque dicen que muchos de los recursos de la isla los gastan en nosotros, pero yo los entiendo porque venimos de afuera.
• ¿Y cómo sentís que la gente se lleva con el régimen en Cuba?
Acá se exagera un poco. La gente está bien, aunque los que están un poco desorientados son los jóvenes, algunos no saben qué hacer y se quieren ir. Los que están en desacuerdo con Fidel Castro son una parte mínima. Muy mínima. Yo me he metido en los barrios y he hablado y la gente está conforme. Aunque siempre está el camarógrafo del otro lado de la costa, en Miami, para ver si viene uno nadando y cuando llega a la costa tiene 4 cámaras enfocándolo y se entera todo el mundo.
• ¿Pudiste apreciar cómo se vivió en Cuba la visita de Fidel Castro a la Argentina?
Sí. Lo vi en directo por televisión. Se dijo que fue un primero de mayo en Argentina. Los cubanos estaban muy conformes con lo que dijo Fidel. Tienen la esperanza de establecer de vuelta las relaciones que se habían perdido con Argentina. Fue muy emotivo, al menos para los argentinos que estamos allá.
• ¿Cuál es a tu entender la diferencia entre Cuba y el resto del mundo?
Hay una palabra que lo resume todo: orden. Allá está todo hecho para que salga bien y a Fidel no se le escapa nada. Hay gente que dice que es un régimen, y lo es pero la gente vive bien. La libertad... dicen que ‘no hay libertad’, pero ¿de qué libertad hablan? Es otra la expectativa de vida que tienen ellos: nacen y mueren con el socialismo. Obviamente que el capitalista que va de acá a Cuba se vuelve. Allá hay todo un orden: de chiquito te van espiando a ver si sos bueno en un deporte, por ejemplo, y cuando sacan a uno que se destaca lo mandan a una escuela especializada para que siga estudiando. Eso lo hace el Estado cubano, que te garantiza la educación, la salud, todo...
• ¿Vivirías en Cuba?
Yo creo que sí. Acá se vive a mil y parecería aburrido vivir en Cuba. Pero allá es otro ritmo, allá es más tranquilo, la gente vive con las puertas abiertas, es distinto... Es una vida más tranquila y es más la idea que yo tengo de vivir la vida.

Fuente: "El sueño se acabó", FM Mercedes, lun a vie de 14.30 a 16

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