Se flexibilizan los protocolos

A través de un comunicado, el gobierno nacional anunció que muchos de los cuidados dejarán de ser obligatorios. El control de temperatura y el rociado de manos con alcohol dejará de ser necesario para el ingreso a edificios, además que no serán necesarios los turnos programados.

“Las únicas recomendaciones que deben mantenerse son las de utilizar tapabocas en espacios compartidos cerrados y abiertos (solo no es obligatorio su uso cuando se circula al aire libre a más de dos metros de distancia de otras personas)”, indica el Ministerio.

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En las medidas todavía se recomienda la distancia mínima de dos metros entre personas, asegurar una adecuada ventilación cruzada y continua en los ambientes, así como continuar con el lavado frecuente de manos.

Finalmente, la cartelera de salud destacó que cada institución y organismo podrá manejar la situación: “podrán establecer las medidas que entiendan pertinentes y necesarias para el desarrollo de cada actividad en particular y tendrán la posibilidad de instrumentar medidas sanitarias adicionales según la actividad”.