Se concretó la marcha por el no cierre del Centro Cardiovascular
Los empleados que temen por sus fuentes de trabajo, fueron acompañados por vecinos, ex pacientes y actuales e integrantes de la Mesa Sindical. También por ex trabajadores de Wilford y Karavell que fueron despedidos el año pasado.
Los empleados del Centro Cardiovascular Mercedes marcharon ayer a la tarde desde la Municipalidad hasta la sede que tiene el mismo, en avenida 17 entre calles 34 y 32. Bajo la consigna “con la salud no se juega”, fueron acompañados por los vecinos de la ciudad.
El pasado miércoles se esperaba una audiencia en la sede de la Secretaría de Trabajo, pero no prosperó, la misma se suspendió y una vez más las autoridades del centro de salud no aparecieron. Reclaman la palabra del consejo directivo, pero hasta acá no hay respuestas.
El rumor de cierre está instalado. Los empleados señalan que en un 90% la decisión está tomada y aparecen conjeturas que nadie aclara, sólo lo que perciben quienes están a punto de perder sus fuentes de ingresos.
Hubo manifestaciones sobre PAMI, que la demora en sus pagos es parte importante de esta decisión, aunque el responsable de la agencia Mercedes, confirmó que los pagos están al día y que los directivos del centro de salud pretenden otras formas de pago que el Instituto no realiza y que además deben salir a declarar los directivos que lo quieren cerrar, decía la semana pasada Nicolás Farías.
La marcha buscaba respuestas ayer, pero no las hay todavía. El acompañamiento lo hicieron vecinos de la ciudad, actuales y ex pacientes, integrantes de la mesa sindical, autoridades municipales y ex trabajadores de Wilford y Karavell despedidos el año pasado.
Hay empleados que tienen más de veinte años trabajando en el lugar. Son cerca de cincuenta las personas que pueden perder su empleo y que hace más de un mes que vienen observando la escasa actividad del lugar, con suspensiones de intervenciones y turnos.
