Kirchner no quiere hablar de reelección

El jefe de Estado optó por el silencio. Dirigentes políticos y sindicalistas desoyen al mandatario y preparan un gran acto para el 25 de Mayo. La Plaza de Mayo sería el punto de lanzamiento de la campaña presidencial.

Sus seguidores quieren a Kirchner como candidato en 2007

A pesar de que el presidente Néstor Kirchner viene repitiendo desde hace tiempo que no piensa, por el momento, plantear la posibilidad de buscar su reelección en 2007, no es un secreto que sus principales referentes políticos están trabajando para lograr ese objetivo.
Por ello, hay quienes aseguran que los actos programados para festejar un nuevo aniversario del 25 de Mayo, el jueves de la semana próxima, servirán de plataforma de lanzamiento.
Sobre qué va a hacer Kirchner, en definitiva, se tejen innumerables conjeturas. Y la reunión de jefes de Estado que esta semana se celebró en Viena, permitió escuchar, de boca del mandatario, la frase “de la política, yo no me voy a retirar nunca”. En base a este comentario y a muchos otros que circulan por los pasillos de Casa Rosada, los voceros presidenciales aseguran que la reelección será un hecho.
Sin embargo, el Presidente prepara su plaza del 25 en la convicción de que es un hecho que proviene de la naturaleza misma de las cosas, señaló el matutino porteño “Clarín”.
“Los muchachos quieren venir”, se le escuchó decir a Kirchner, como desentendido de lo que pasa a su alrededor, en una charla privada en Viena. “¿Por qué no podemos celebrar?”, se preguntó el jefe de Estado.
La Plaza -en referencia a la Plaza de Mayo- se insinúa como un ensayo antes de una decisión: la de avanzar o no hacia un segundo período, que parece fuera de contexto en una actividad que pide y exige todo.
La idea de que Kirchner renuncie a su reelección tiene no menos de un año ya danzando, a partir de especulaciones políticas que lanzaron algunos analistas. Pero estos comentarios no son hoy ni tomados en cuenta ni en el entorno del Presidente.
Nadie cree
“Si digo lo que voy a hacer no me van a creer, así que mejor no digo nada”, insistió en las horas pasadas en Viena el Presidente. Hay que reforzar la definición diciendo que, en efecto, Kirchner no ha dicho todavía qué hará.
Pero algunos, unos pocos, se preguntan, ¿qué hace a Kirchner insistir en la incógnita? Algunos analistas políticos advierten que, como tradición, Kirchner elige para una elección al candidato que mejor adhesión suma entre la gente, de acuerdo con las encuestas que contratan.
Si esta premisa se cumple, la única persona cercana al Presidente y que reúne un buen caudal de aceptación pública es su esposa la senadora Cristina Fernández.
Pero, por un lado, es casi seguro que nadie en el entorno presidencial conozca, a ciencia cierta, qué piensa o qué quiere hacer la primer dama. Y, por otro lado, no es un secreto que Cristina siempre expresó su interés de postularse a la gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Muchos de los antecesores en el cargo que ocupa Kirchner utilizaron el balcón de Casa Rosada -que da a la Plaza de Mayo-, como punto de contacto con la gente, en cuanto mitin político se hizo en el paseo público.
Sin embargo -y también en Viena-, el mandatario argentino habría expresado a algunos de sus acompañantes: “los balcones en la Argentina cumplieron un ciclo”. Así dejó trascender que no saldría al balcón durante la concentración del 25 de Mayo.
Como sea el camino que tome, la historia enseña que no hay quien haya hecho una acumulación de poder semejante a la que hoy tiene Kirchner, con la única intención de delegarlo.