La Fiesta del Salame de la administración selvista pasó la prueba con un apoyo masivo del público y con un espaldarazo político sin precedentes en este evento por parte del ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien pasó todo el día en la ciudad y realizó anuncios importantes como su deseo de ser gobernador en 2007.
A Carlos Selva se lo vio contento sobre el final de la tarde del domingo en el ex Instituto Martín Rodríguez y no era para menos: el clima acompañó, a pesar de las frías noches del viernes y sábado; la gente se convocó masivamente; más de 60 productores participaron del concurso ganado por Sergio Sirello y encima recibió un fuerte respaldo político al tener en la ciudad la visita de Aníbal Fernández.
Si bien esta 30 edición de la Fiesta nacional del Salame Quintero dejó algunas aristas por mejorar en las próximas ediciones, que bien fueron reconocidas por el director de Turismo y organizador del evento, Hernán Courtade, (la demora en la atención de la cantina municipal y los shows musicales en horario nocturno con el severo frío imperante como ejemplos), pero también confirmó que se trata de la fiesta más reconocida por los visitantes –llegados en mayoría– y que también seduce al público local.
Todo comenzó el viernes por la tarde con la inauguración oficial que contó con la presencia del secretario de Turismo de la provincia, Miguel Cubero. La fría noche conspiró y muy poca gente llegó a disfrutar de los shows musicales de artistas locales.
Ya el sábado la fiesta pareció otra. Hubo mayor convocatorias durante la tarde y noche y todo cerró con un espectacular show del grupo Amboé, que hizo delirar a la gente con su buena onda. Los muchachos se portaron muy bien y hasta terminaron con una especie de carnaval carioca su presentación, mientras los fuegos artificiales inundaban el cielo despejado en el final de la jornada.

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Un domingo total
El tercer día de la fiesta fue el más especial. No sólo por el tradicional concurso, sino también por tratarse de un domingo especial que contó con la presencia del ministro del Interior, Aníbal Fernández, quien llegó cerca del mediodía e ingresó por la entrada de avenida 2 junto con el intendente Selva y demás autoridades. Lo trascendental de parte del ministro llegó en un improvisado reportaje en su recorrida por los stand, ya que aseguró que será gobernador de la provincia de Buenos Aires en el 2007 (ver aparte).
Fernández recorrió los puestos de los productores de salame y probó bocado en cada uno, al tiempo que saludó con un ánimo muy distinto al que tuvo el pasado lunes cuando vino a la presentación de la Policía Buenos Aires 2. Almorzó en el predio, también junto a la secretaria de Interior, Teresa García, quien demoró más en llegar al ex Instituto Martín Rodríguez. Luego el ministro se tomó un tiempo para tocar la guitarra junto con uno de los integrantes del grupo Vocal Mercedes en una improvisada sesión cerca de los vestuarios de los artistas y escuchar los chistes demasiado obvios y trillados de Beto Molla.

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Premios y show de Parodi
Cerca de las 3 de la tarde llegó un momento muy esperado por todos: la premiación de los productores ganadores. En esta ocasión ningún integrante de la familia Di Pieri estuvo entre los diez primeros puestos, algo que llamó la atención y que puede transformarse en un hecho más que significativo para esta tradicional fiesta.
El ganador del evento fue Sergio Sirello, quien recibió la copa ganadora de parte del ministro Fernández y recibió el saludo de sus entusiastas familiares. El segundo lugar fue para Omar Viale; tercer premio fue para Pascual Mariella y cuarto, Darío Sirello.
Luego de la premiación llegó el turno de disfrutar con la música del grupo Vocal Mercedes y recién para el cierre se concretó la presentación de Teresa Parodi, quien deleitó al público con un show muy bien armado y prolijo.
Una nueva fiesta pasó bajo esta nueva administración y un nuevo “aprobado” se ganó la comisión organizadora. Quedan cosas por mejorar y los organizadores son conscientes de ello y eso es un buen augurio para el futuro.