Durante “La Previa”, Gabriel Anello conversó con Ramón Dupuy, quien rememoró la trágica pérdida de su nieto Lucio y aprovechó el contexto de la Marcha Federal LGBT para manifestar sus opiniones sobre los movimientos sociales actuales. Con una entonación firme, aclaró que no se opone a quienes reclaman derechos, sino a la forma extremista de algunos sectores feministas. Su argumento se centró en que, cuando le fue arrebatada la vida a Lucio, no observó manifestaciones ni declaraciones de colectivos, como las de actrices radicalizadas, que se posicionaran en contra de quienes, a su juicio, representan la violencia en el caso.

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Ramón no dudó en criticar a quienes minimizaron la tragedia al insinuar que el joven podría haber incurrido en alguna falta. Según el abuelo, resulta inaceptable atribuir responsabilidades a un niño de cinco años ante una violencia tan brutal. Esta declaración, sumada a su crítica, resaltó la necesidad de un análisis profundo de la realidad, en lugar de respuestas simplistas y deshumanizadoras.

Asimismo, Ramón reflexionó sobre las recientes declaraciones del presidente Javier Milei, señalando que, aunque no coincide en todos los puntos, respeta su posición. No obstante, insistió en que las opiniones no deben ser usadas para tergiversar hechos ni para unificar posturas de manera forzada. En su mensaje final, subrayó que cada persona posee un pensamiento propio, y rechazó la idea de que se imponga una visión única a través de protestas que, en su opinión, se alejan de lo que realmente ocurre en situaciones tan dolorosas como la vivida con Lucio.

Las declaraciones del abuelo de Lucio Dupuy evidencian la complejidad del debate en torno a la respuesta social y política frente a la violencia, resaltando tensiones entre distintos sectores y la dificultad de hallar consensos en momentos de tragedia.