El Papa no pudo celebrar la misa del Domingo de Ramos
Por primera vez en 26 años de pontificado, Juan Pablo II no celebró ayer la misa del Domingo de Ramos por problemas de salud, pero se asomó a la ventana de su estudio en el Vaticano como señal de que sigue guiando la Iglesia católica.
Juan Pablo II da la bendición desde la ventana de su estudio en el Vaticano
El Papa, convaleciente, apareció en la ventana de sus apartamentos del Vaticano para bendecir a los miles de fieles congregados para la misa del Domingo de Ramos, inicio de las liturgias de Semana Santa.
La breve aparición a la hora del rezo del Angelus fue recibida por un largo aplauso de unos 50 mil fieles reunidos en la plaza de San Pedro.
Karol Wojtyla, que cargaba en la mano un ramo de olivos, parecía muy cansado y molesto por la cánula que le fue instalada hace tres semanas en la tráquea. No habló durante la aparición, que duró cerca de un minuto, y dio un golpe al atril, lo que fue interpretado como una manifestación de nerviosismo por la traqueotomía a la que fue sometido.
Juan Pablo II designó al cardenal italiano Camillo Ruini para representarlo en la misa.
Por prescripción médica, el Papa, de 84 años, debe limitar sus salidas y el uso de la palabra, y cada aparición es analizada detalladamente debido a que el Vaticano no ha divulgado partes médicos sobre su salud desde que regresó al palacio apostólico.
